¿Has oído hablar del triángulo de trabajo de la cocina? Pues si estás pensando en reformar tu cocina presta atención, porque aquí está la clave para que la cocina resulte realmente funcional y práctica.
¿En qué consiste el triángulo de la cocina?
El triángulo de la cocina hace referencia a la disposición en la que se deben encontrar los tres elementos principales de una cocina, el frigorífico, la placa de cocción y el fregadero. Estos se deben colocar de tal manera que creen un área de trabajo en forma de triángulo, de ahí el nombre.
Gracias a este triángulo, estarán conectadas las tres áreas de trabajo de la cocina,con una suma que no debe exceder los 6,50m. aproximadamente.
Esta será la separación máxima, ya que si no se respetan estos márgenes, habrá demasiado espacio de separación y no resultará cómodo trabajar. Lo mismo sucederá si disponemos de más espacio, no será nada fluido ni práctico. Conseguir el equilibrio en este triángulo nos simplificará la cocción y al mismo tiempo, reducirá el tráfico en el lugar de trabajo.
Este triángulo se ha tenido que adaptar a las nuevas realidades de las cocinas, que cada vez son más comunes abiertas a salones y comedores, por lo que se ha hecho más difícil colocar los electrodomésticos en un diseño triangular rigurosamente organizado.
Por ello, la cocina debe concebirse como un espacio para disfrutar mientras cocinamos y para lograrlo, es necesario la división de la cocina en zonas de trabajo, maximizando así la eficiencia de cualquier espacio.
En este sentido, en cocinas abiertas, se le da más prioridad a las zonas de trabajo, que consiste en agrupar los accesorios y dispositivos de acuerdo con el uso. Por lo que cada zona de trabajo contendrá todo lo que necesitemos para realizar una tarea específica.