Consejos para organizar armarios y vestidores

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Hoy queremos hablarte de armarios y vestidores, de cómo organizar la ropa para sacarles el máximo partido t tener todas tus prendas ordenadas y accesibles.

Un paso fundamental para diseñar cualquier armario o vestidor, es conocer qué tipo de prendas vas a guardar. Así que, si te has decidido por fin y vas a reformar el armario, presta atención a los pantalones, trajes de chaqueta o vestidos que tienes. No es lo mismo tener muchas camisetas que vestidos.

Para ello, es clave que agrupes las prendas por tipos y las midas para construir un documento que recoja por ejemplo: 1 m de lineal de camisas y chaquetas, 2 pilas de 50 de cm de jerseys, 15 pares de zapatos…

Una vez que tengas claro el tipo de ropa que tienes y sus medidas, será importante que pienses cómo vas a almacenarla. Por ejemplo, los pantaloneros de percha permiten colocar muchos pantalones en poco espacio pero es difícil mantener el orden. Por ello, los pantalones están mejor colgados individualmente en perchas de pinza o, como mucho, en pantaloneros frontales.

Esto también sucede con las camisetas. Aquí te aconsejamos que eches mano de los consejos del método de Marie Kondo, doblando las camisetas en los cajones, te resultará mucho más fácil localizar cada camiseta.

Si no tienes del todo claro cómo ordenarlas, haz el ejercicio de ver lo que ocupan colgadas. Ve ajustando así tu lista hasta que tengas muy claro cuánta ropa tienes y cómo la quieres almacenar en tu armario nuevo.

Por otro lado, piensa en toda la tipología de ropa que tienes, tanto prendas de invierno como de verano, así como los pijamas, la ropa de deporte, la de estar en casa, las bufandas, los guantes, etc.

Al medir y cuantificar las prendas, obtienes de forma muy clara y visual la cantidad de espacio que necesitas para cada prenda. Si estás planificando un solo armario, quizá es menos importante. Pero si estás considerando rehacer varios, piensa en cómo distribuir el almacenamiento conjuntamente. Quizá tus abrigos pueden estar en el vestíbulo, con los zapatos y no necesariamente en tu dormitorio. O tus trajes de fiesta pueden ir a una caja y permanecer en el altillo del cuarto de invitados.